El SLK 55 AMG modelo 2012 tiene un motor de 5,5 l de cilindrada y 422 CV de potencia a 7000 rpm. Con él, el SLK 55 AMG tiene un consumo de 8,4 l/00 km, bajo para un coche de gasolina de potencia tan elevada. Actualmente todos los vehículos de gasolina de más de 400 CV gastan más carburante en las condiciones de homologación. El anterior SLK 55 AMG tenía 360 CV de potencia y su consumo medio homologado era 12,0 l/100 km.
Una de las cosas que tiene este motor para que su consumo sea moderado es un sistema de desconexión de cilindros («AMG Cylinder Management»). Cuando no se pisa mucho el acelerador, el sistema cierra las válvulas y desconecta la alimentación de cilindros dos, tres, cinco y ocho. Esta función está disponible entre 800 y 3600 rpm siempre y cuando se haya seleccionado la posición «C» y no se pise mucho el acelerador (es decir con poca carga). Con cuatro cilindros en funcionamiento, el par máximo del motor puede llegar a 230 Nm. El motor siempre arranca en modo de ocho cilindros.

El motor del SLK 55 AMG (que Mercedes-Benz distingue con la denominación «M152») tiene gran parecido con el que llevan otros modelos actuales de AMG (como el E63 AMG, CLS 63 AMG, S63 AMG y el CL 63 AMG). Son motores V8 con el mismo diámetro y carrera de cilindros y la misma distancia entre el centro de los cilindros, además de tener todos ellos alimentación por inyección directa. Pero hay una diferencia fundamental y es que el del SLK 55 AMG no lleva sobrealimentación como que sí lleva el motor de los otros coches señalados. Más detalles sobre el motor del SLK 55 AMG.
El control de estabilidad tiene dos modos de funcionamiento a elegir desde un mando en el salpicadero: «ESP ON» y «ESP SPORT». Adicionalmente también se puede desconectar por completo. El control de estabilidad tiene una función denominada «Torque Vectoring Brakes» que «en giros críticos» (según cuenta Mercedes-Benz) frena la rueda intenterior de la curva para ayudar a que el coche cambie de trayectoria.
Mercedes-Benz ofrecerá para este modelo, además del ajuste de serie del chasis, uno denominado «AMG Handling» que incluye una suspensión más dura, un diferencial autoblocante y frenos de disco delanteros de material compuesto. Hay algún detalle decorativo que distingue a las unidades con este paquete de equipamiento.

Como otros modelos de SLK podrá llevar un techo solar cuya característica principal es que puede oscurecerse (no llega a hacerse opaco) pulsando un botón para disminuir la cantidad de luz y calor que entra en el habitáculo. Además del clásico cortavientos, el SLK puede tener un sistema —denominado «AIRGUIDE»— compuesto por dos piezas de plástico transparente, situadas detrás de los reposacabezas, que también reducen las turbulencias que se producen en el habitáculo cuando se circula descapotado a velocidad elevada. Vídeo ilustrativo de estos dos dispositivos.